jueves, 3 de septiembre de 2009

LA CONTEMPLACIÓN.

La espiritualidad cristiana es una sola. Todos los cristianos, seglares, religiosos consagrados de congregaciones activas y religiosos consagrados contemplativos, son llamados a profundizar lo más posible en su vida de oración. Y el grado más elevado de ésta es sin duda la oración contemplativa, cuya cima se llama propiamente contemplación.

La contemplación puede ser infusa o adquirida. La primera forma se concede a algunas almas privilegiadas como un don totalmente gratuito de Dios. La contemplación adquirida es el resultado de un esfuerzo personal bendecido por Dios para crecer continuamente en el amor divino a través del ejercicio de la oración y de la conversión personal.

La vida en la que predomina más la actividad apostólica que la oración propiamente dicha es menos perfecta. Si María, con su actitud contemplativa, "escogió la mejor parte", como declaró Cristo Jesús, es que la otra parte -la de la actividad propiamente dicha- es de calidad inferior.

Cierto que María no podría permanecer durante días sentada a los pies del Señor para contemplarlo. Cristo sabía que el trabajo de Marta para servirle a él y a sus amigos era algo muy valioso y meritorio. El servicio a los hermanos o el trabajo apostólico propiamente dicho es un deber impuesto por Jesús a los que le siguen: "id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que crea y sea bautizado, se salvará; pero el que no crea será condenado" (Mc 16,15-16).

Éste es el trabajo apostólico que Cristo pide concretamente a los que le siguen: predicar el evangelio. Pero la predicación de una doctrina y de un ideal no se hace exclusivamente con la palabra hablada o escrita. Esta continúa también en el modo privilegiado de comunicar el mensaje. Y este mensaje evangélico se transmite asimismo por medio de todo aquello que se puede percibir a través del mensajero.

Todos aquellos que entran en contacto con él, su manera de pensar, de raciocinar, de sentir, de juzgar, de actuar, de relacionarse con los demás, de comportarse en las diferentes situaciones y circunstancias en que el mensajero se encuentre, son a la vez mensaje.

lunes, 9 de febrero de 2009

PAREMOS LA GUERRA EN SRI LANKA.

La guerra civil de Sri Lanka, uno de los conflictos más prolongados y más olvidados de Asia, podría estar entrando en una sangrienta recta final con 250.000 civiles atrapados en el fragor de los últimos combates.

El gobierno de los EE.UU., uno de los principales países que dan ayuda para el desarrollo de Sri Lanka, ha demandado que se respeten de las zonas de seguridad, pero debe ahora dejar en claro que si el gobierno y los rebeldes no garantizan la seguridad de la población civil, la ayuda y los acuerdos de comercio pueden estar en riesgo.

Altos funcionarios y diplomáticos del Departamento de Estado de EE.UU. se han comprometido a informar a la Secretaria de Estado Hillary Clinton del número de mensajes enviados por miembros de Avaaz sobre la crisis de Sri Lanka y responder a nuestros mensajes por escrito. Esta es una ocasión extraordinaria de influir en la respuesta del gobierno de Obama a las crisis humanitarias. Cliquea aquí para enviar un mensaje ahora:

http://www.avaaz.org/es/sri_lanka_civilians

Han sucedido atrocidades y tragedias en esta larga guerra civil de Sri Lanka, muchas veces no cubierta debidamente por los medios y escondida de los ojos del mundo, en parte debido a la brutal campaña contra el periodismo independiente de parte del gobierno cingalés. El fin de los combates no resolverá en si mismo las injusticias que en última instancia le dieron origen. Luego que los disparos se acallen, las legítimas demandas de los tamiles y otros grupos minoritarios habrán de ser resueltas en el marco de un posterior proceso de diálogo político y reconstrucción.

Pero ahora, en lo que parecen las instancias finales de este conflicto, los 250.000 tamiles civiles atrapados en la línea de fuego no deben convertirse en las últimas víctimas de esta guerra. Sumemos nuestras voces a la de aquellos activistas y defensores de los derechos humanos que durante estos años han luchado contra la marginalización de grupos minoritarios y el deterioro de los más básicos derechos civiles en Sri Lanka.

Cliquea aquí para reclamar a la diplomática más encumbrada de la administración Obama, la Secretaria de Estado Hillary Clinton, que proteja la vida de miles de civiles en Sri Lanka:

http://www.avaaz.org/es/sri_lanka_civilians